12 poemas para 12 meses

Esperamos que 2012 sea una vez más un año de poesía, y por ello Club de poetas pone a la venta su calendario, no sin felicitar el año a todo aquél que se deje caer por el club y al que no. Haceos con el vuestro en nuestro contacto de ventas donde aclararán todas vuestras dudas.

lunes, 24 de mayo de 2010

JOSÉ SANTOS CHOCANO


Nació en Lima, y llevó una vida turbulenta que en alguna ocasión le llevó a la carcel. Inicialmente cultivó la poesía investida de romanticismo, pero posteriormente su obra toma un giro modernista, y la dedicándola a versar sobre justicia social. Llegó a ser conocido como el "Cantor de América", nombre con el que fue bautizado por las generaciones posteriores.
Aunque vivió lejos de su patria, es considerado el poeta por excelencia del Perú, por sus continuas evocaciones de la tierra peruana.
Entre sus libros publicados destacan: "En la aldea" (1895), "El canto del siglo" (1901), "Alma América" (1906) y "Poemas del amor doliente" (póstumo, 1937).
Murió asesinado en Santiago de Chile, en 1934.
(Datos recogidos en http://www.carlosreyna.com.ar/schocano.html)

LA GLORIA DEL PROCESO

Don Miguel de Cervantes me prestará su pluma,
para escribir mi nombre debajo del proceso.
Quien me enseñó su idioma, me enseñará a estar preso:
también quiso abrumarlo la pena que hoy me abruma.

Insinuará él razones de sutileza suma
y aguzará ironías contra el destino avieso;
así, sobre las olas de mi iracundo acceso,
se mecerá su risa como una flor de espuma.

Maestro de los siglos, me ayudará a ser fuerte:
el día en que los hombres quieran pesar mi suerte,
vendrá a mí esa figura caballerosa y alta;

y cuando el fiel severo del tribunal se exceda,
me tenderá Cervantes la mano que le queda
o arrojará a un platillo la mano que le falta.


CANTO AL RIO MAGDALENA

Nadie supe que vieja caravana
resbaló por tus márgenes frondosas,
bebió en tus aguas y peinó con rosas
tu retorcida cabellera cana.

Hay en el culto de tu pompa indiana
sombras de héroes, espíritus de diosas
y ecos de unas batallas fragorosas
que parecen venir del Ramayana...

En tu caudal de trágicas arrugas,
hacen temblar sus mallas los caimanes
y brillar su coraza las tortugas;

y en tu escudo ovalado y reluciente,
alrededor de un choque de titanes,
pone su monograma una serpiente.